El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha manifestado su intención de ordenar al Departamento de Justicia que «persiga enérgicamente la pena de muerte» una vez que asuma el cargo en enero. Esto se produce después de que el presidente Joe Biden conmutara las penas de muerte de 37 presos federales por cadena perpetua.
Trump ha sido un firme defensor de la pena de muerte, especialmente en casos de violadores, asesinos y terroristas. De hecho, durante su campaña presidencial de 2024, prometió buscar la pena de muerte para los narcotraficantes y aquellos que cometan crímenes violentos contra ciudadanos estadounidenses o agentes de policía.
Es importante destacar que las decisiones de clemencia de Biden no pueden ser revertidas por Trump, pero su administración podría reanudar la búsqueda de la pena de muerte en futuros casos. Actualmente, hay más de 2.000 personas en Estados Unidos que están en el corredor de la muerte, según el Centro de Información sobre la Pena de Muerte.
En cuanto a las reacciones a las conmutaciones de Biden, han sido mixtas. Algunas familias de los afectados han expresado alivio, mientras que otras han manifestado su decepción y enojo. La viuda de un agente de policía asesinado en 2005, por ejemplo, expresó su decepción por la decisión de Biden, afirmando que el condenado «tomó la decisión de elegir la violencia» y que «sabía las posibles consecuencias».
Fuente consultada:CNN
Foto:El Pais